¡Estas DOS Palabritas lo cambian todo!

A lo mejor haz dicho esto, o alguna vez alguien te ha dicho estas dos palabritas…

¡Basta ya!

Estas dos palabritas lo pueden cambiar todo cuando se trata de vencer tus miedos o cualquier pensamiento negativo que te paraliza.

Aunque no lo creas si comienzas a usarlas, las cosas van a cambiar. A lo mejor te preguntas… Pero ¿cómo?

Quiero aclararte que no estoy hablando de enfermedades mentales que han sido diagnosticadas y que necesitan otra clase de terapias y medicina.

Estoy hablando más bien, de una manera de hablarse a uno mismo cuando batallas con pensamientos cotidianos que te están impidiendo tomar acción. Quizá, te están robando la alegría y la paz. A lo mejor, te infunden miedo y te privan de disfrutar la vida.

Te confieso algo…

Estas dos palabras me han ayudado a mi cuando he querido compararme con otros. Cuando me he sentido llena de preocupaciones. Cuando parece que no puedo hacer algo y me siento inútil. ¡Te garantizo que funciona!

Cómo usarlas…

La gran eficacia de decirte a ti misma ¡Basta ya! radica en que cuando lo haces, estás tomando autoridad sobre tus pensamientos. Te hablas a ti misma como si estuvieras hablándole a tu hija o hijo. Es más, cómo si estuvieras corrigiéndote a ti misma como una mamá.

¡Trátalo hoy mismo! Cuando un pensamiento negativo te invada. Cuando un miedo o temor vuelva a aparecer. Cuando te sientas menos que o te estás imaginando cosas que no son o que estás fabricando en tu mente sin que hayan sucedido, Haz lo siguiente…

Busca un espejo y repite: ¡Basta ya! Si tienes que hacerlo repetidas veces, hazlo. Este será el principio para empezar a tomar el control de tus pensamientos.

Algo que debes recordar…

Tú cerebro está allí para ayudarte y no para controlarte. Por lo tanto, tienes que tomar el control de pensamientos que no están contribuyendo a tu estado emocional saludable.

En un curso que tomé recientemente, escuché esto:

“Las palabras más poderosas son las que te dices a ti mismo”

En el curso también aprendí que la neuro plasticidad del cerebro se refiere al hecho de que nuestros cerebros son increíblemente flexibles. Son dinámicos y adaptables. Tenemos el poder de cambiarlos para mejorar. Podemos usar nuestras mentes para cambiar la estructura física de nuestros cerebros, lo cual es sorprendente. Esto funciona así:

Cuando aprendes algo nuevo, la estructura de las neuronas cambia. En palabras simples,  desarrollas nuevas sinapsis. Es decir, se forman nuevas conexiones con otras neuronas, se establecen nuevas vías neuronales. Las neuronas se fortalecen con la repetición. Mientras más uses estas dos palabras ¡Basta ya!, para contrarrestar tus maneras negativas de pensar, vas a ver resultados.

Los estudios científicos también dicen que para obtener mejores resultados cuando uno se habla a sí mismo, es importante usar tu nombre. Por ejemplo: Noemí, ¡Basta ya! Me parece muy interesante y valiosa esta práctica.

Lo que dice la Biblia

Creo que la Biblia nos reafirma en esto que te estoy diciendo. Lee conmigo:

“Pues como piensa dentro de sí, así es”
Proverbios 23:7, (LBLA)

Si estamos entreteniendo pensamientos negativos o pensamientos que contradicen la verdad que conocemos. Si estamos creyendo mentiras que llegan a nuestras mentes. Si estamos pensando en cosas que nos infunden miedo, estamos dando lugar para vivir vidas derrotadas. Esta no es la vida que Dios quiere para ti.

Tú y yo tenemos la mente de Cristo. Por lo tanto, tenemos que entrenarnos a pensar como dijo el apóstol Pablo en Filipenses 4:8:

“Y ahora, amados hermanos, una cosa más para terminar. Concéntrense en todo lo que es verdadero, todo lo honorable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo bello y todo lo admirable. Piensen en cosas excelentes y dignas de alabanza”.

“Cuando cambiamos nuestro pensamiento, cambiamos nuestras creencias.
Cuando cambiamos nuestras creencias, cambiamos nuestro comportamiento”

Deja un comentario y dime si esto te ayuda y si lo vas a poner esto a la práctica.

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